Bajo el lienzo “Mujer
planchando”, que Pablo Picasso pintó cuando tenía 22 años, se ha encontrado la
imagen de un hombre. Este cuadro fue donado en 1978 al Museo Guggenheim de
Nueva York por un coleccionista alemán, y ya entonces los expertos del museo
detectaron una sombra detrás de la imagen de la mujer. Johan Delaney, con la
ayuda de cámaras infrarrojas, ha conseguido reproducir la imagen con más
detalle del hombre, aunque aún ignoran de quién se trata.
La primera imagen de
la mujer luchando con la plancha, contrasta con la figura tranquila del hombre
que se limita a observar. Quizá, jugando con la ironía, sea un reflejo de la
vida: la mujer trabajando en casa mientras el hombre se limita a mirar su
esfuerzo. Parece que nada cambia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario